martes, 29 de mayo de 2018

DE COMO SANT ASTABIN PASÓ A CASTILLA

Gabriel CARRASCO HURTADO



Ante nosotros una preciosa joya literaria medieval en romance gallego que es, además, un documento sobre una de las demarcaciones más importantes que el Reino de Jaén ha tenido: la Taifa de Baeza.

Esta demarcación andalusí –que pertenece a lo que se ha dado en llamar las terceras taifas, sucesoras al decadente califato almohade- pasa por ser uno de los momentos más influyentes de lo que hoy es la provincia de Jaén, junto a la Oretania íbera, por ejemplo.
Recoge, la cantiga, lo que de primera mano vivió el niño que sería Alfonso X, Rey de Castilla y León:
Sucedía que su buena madre, la Reina Beatriz de Suabia tenía una curación milagrosa cuando su padre, el gran Fernando III de Castilla dirigía personalmente, en el verano de 1.226, el asedio del paso definitivo a las Andalucías: el asedio a Capela o Capilla; todo con la eficaz ayuda de Abd Allah ben Muhámmad al-Bayyasi, Emir de Baeza.
Cuentan las crónicas que allí capituló para la cristiandad al Rey Fernando Sant Astabin con todos sus téminos y aldeas… 

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Cantigas de Santa María de Alfonso X el Sabio. Cantiga 256. 


viernes, 18 de mayo de 2018

‘LOS RIVELLESI DE LAS NAVAS’, COLABORACIÓN EN EL ANUARIO STELLA 2018 (EDICIÓN PAPEL)


Portada de Stella 2018


Colaboración de Gabriel Carrasco Hurtado publicada en el Anuario Stella 2018 (edición papel).
Resumen/abstract: el trabajo describe -a partir de varios documentos- la procedencia, vida y avatares de un joven italiano llamado Francesco Guida Pangallo, natural del municipio de Rivello en el Reino de Nápoles-Dos Sicilias, que recala en Las Navas de San Juan en 1.875.
A partir de él conocemos una descendencia muy amplia que hereda su apellido, Güido (variado) y su arte.
‘Los Rivellesi de Las Navas’, paginas 49-55 de Stella 2018 edición papel. La versión digital todavía no ha sido publicada por la editora, la Antigua y Real Cofradía de Nuestra Señora de la Estrella de Las Navas.

jueves, 17 de mayo de 2018

domingo, 13 de mayo de 2018

DE ‘LAS NAVAS DE SAN JUAN’ A ‘NAVAS DE SAN JUAN’ A TRAVÉS DE VARIOS EDICTOS EN LA GACETA DE MADRID, EL BOLETIN OFICIAL DEL ESTADO

Gabriel Carrasco Hurtado



Por costumbre y sobre el papel la vieja alquería y luego lugar castellano, llamado hoy oficialmente como Navas de San Juan, siempre se nombró como ‘Las Navas’ (Lugar de las Navas, Las Navas de Santisteban del Puerto, etc…). Como 'El Castellar' y 'Castellar' -antiguamente de Santisteban-. Desde la edad media hasta nuestros días, especialmente desde fuera del municipio; dentro se nombra hoy, al uso, como ‘Navas’ a secas.
Tras la segregación de la Villa de Santisteban del Puerto -a principios del s.XIX- se pidió que se le añadiera el patrón en el nombre y así se añadió ‘de San Juan Bautista’ (se barajaron otros añadidos) pero quedó como ‘Las Navas de San Juan’. Así lo encontramos en numerosos documentos, que en esta ocasión son Edictos insertados en La Gaceta de Madrid (Boletín Oficial del Estado).
Corresponden a publicaciones de entre los años 1.837 y 1.861 y vemos con claridad como entre 1.858 y 1.860 se pasa de ‘Las Navas de San Juan’ a ‘Navas de San Juan’:



España.- Navas del Marques (se refiere a Las Navas de San Juan, es una errata)  18 de Noviembre.-
Ha sido invadida la villa de las Navas de San Juan por unos 40 facciosos de caballería al mando de Orejita, Peñuelas, Peñasco, Maza y Mansilla.
Gaceta de Madrid núm. 1096, de 29/11/1837, página 2.
Antes de ayer fue invadida la villa de las Navas de San Juan por unos 4O facciosos de caballería aí mando de O iéjita, Peñueías, Peñasco, Maza y Mansillá ; se llevaron los fondos ^públicos, robaron hasta los pañuelos que tenían al cuello las mugeres, y se llevaron al alcalde y dos regidores. Este pueblo ha quedado abandonado á la rapacidad de los facciosos desde que á él y á los colaterales sobre la línea de Sierra Morena le¿ quitaron un destacamento; y si este invierno no le vuelven 4 poner, como que cuando llueva hay que hacer la sementera y; cogida de aceituna, quedanlos pueblos, ain-hombres y aun siú mugeres, y. las partidas de la Mancha serán duéñas de ellos.


Ayuntamiento constitucional de las Navas de San Juan.
Gaceta de Madrid núm. 1078, de 17/12/1855, página 2.
AYUNTAMIENTO CONSTITUCIONAL DE LAS NAVAS DE SAN JUAN. D. Mateo M olino, Alcalde prim ero constitucional y Presidente del A yuntam iento de esta villa. Hago saber que la corporación de mi presidencia, h a ­ biendo adm itido la dim isión que ha hecho D. José Marios, médico titular de esta dicha v illa , ha acordado an u n ciar la vacante de esta plaza, la cual deberá ser provista para el día 29 de Febrero próxim o, por ser el en que cum ple el compromiso dé dicho profesor. La referida titular está dolada con 300 ducados ánuos, pagados por trim estres vencidos de estos p ro p io s, por la asistencia a los pobres de solém nidad y causas de oficio, quedando el agraciado en la libertad ae igualarse con el v e cin d ario , qiie su núm ero podrá ser el de unos 700. Será preferido, para obtener está p la z a , el aspirante que reú n a las facultades de m edicina y cirugía. Las solicitudes deberán dirigirse á esta*Secretaría, francas dé pórte. Navas de San Juan 4 / de Diciem bre de 1855.— EI Alcalde co n stitu cio n al, Mateó Molino. « P o r su m andado Vicente E scobar, Secretario. 4439

Alcaldía constitucional de las Navas de San Juan.
Gaceta de Madrid núm. 325, de 21/11/1858, página 2.
ALCALDIA CONSTITUCIONAL D E LAS NAVAS DE SAN JUA N . D. Luis José S án ch ez, Alcalde y P residente del A yuntam iento constitucional de esta villa. Hago s a b e r , que no habiendo habido aspirantes á la plaza de Médico titu lar de la m ism a, el Ayuntam iento que presido ha acordado se vuelva á publicar convocan* do aspiran tes con la dotación de 1.000 ducados anuales, pagados de los fondos de propios; 300 ducados por la asistencia á los enferm os pobres que clasificará el Ayuntam ien to , y 700 ducados pagados por los vecinos y cobrados por el A yuntam iento, cuya cantidad será entregada por trim estres al que obtenga la p la z a ; teniendo entendido qué los que la soliciten han de re u n ir las circu n stancias de ser Médico y C iru jan o , sin la cual no serán adm itidas, acom pañando á las solicitudes nota del tiempo que llevan de ejercer las facultades y los pueblos donde hay an estado. Lo que podrán verificar en el térm ino de un mes, contando desde la inserción del presente anuncio en el Boletín oficial y Gaceta de Madrid. N avas de San Ju an 27 de O ctubre de 1858 Luis José Sánchez — P, A, del A. C., Ju an B autista Burguillos. — _ _ _ '^ ,3


Alcaldía constitucional de Navas de San Juan.
Gaceta de Madrid núm. 345, de 10/12/1860, páginas 2 a 3.
Alcaldía constitucional de Navas de San Juan. b. Luis Rodríguez Requena , Alcalde accidental de.esta villa.
Hago saber, que habiéndose adm itido la dimisión al Secretario de esta corporación m unicipal por el Sr. Gobernador de la provincia, se anuncia la vacante de la Secretaría por térm ino de 30 dias, á contar desde la in ­ serción en el Boletín oficial, la cual se halla dotada con 4.400 rs. anuales. Las personas que se interesasen en la misma , dirigirán sus solicitudes á la Secretaría interina de la co rporación. Navas de San Juan 28 de Noviem bre de 1860.=Luis R odrigue/ llequena.—Por su m andado, Antonio Mnza, Secretario interino. 6085__3


Alcaldía constitucional de Navas de San Juan.
Gaceta de Madrid núm. 52, de 21/02/1861, página 2.
Alcaldía constitucional de Navas de San Juan. D. Antonio Moreno y Moreno, Alcalde Presidente del Ayuntamiento constitucional de esta villa. Hago saber que habiendo hecho dimisión el Secretario de esta corporación municipal, se anuncia la vacante de la becretana de la misma por el término de 30 dias contados desde la inserción del presente edicto en el Boletín oficial de la provincia y Gaceta de Madrid, la cual está dotada con 4.400 rs. anuales. Las personas que se encontrasen adornadas con los requisitos necesarios para su desempeño podrán hacer sus solicitudes dirigidas á la Secretaría interina de la referida corporación. Navas de San Juan 11 de Enero de 4861.=Antonio M. y Moreno. 311—3


Los contenidos de los Edictos merecen otros comentarios…



jueves, 10 de mayo de 2018

Restauración del Castillo-Palacio de Sabiote

Gabriel CARRASCO HURTADO


La Casa de Santisteban del Puerto y la de Camarasa (Sabiote) son casas agregadas al “piélago inmenso de grandezas”[1] que conforma la Casa Ducal de Medinaceli; la de Santisteban se produce por el matrimonio de Joaquina María de Benavides y Pacheco y Luis María Fernández de Córdoba y Gonzaga, en 1.789 y la de Camarasa por la sucesión en 1.948 de Ignacio Fernández de Henestrosa y Gayoso de los Cobos, XVI Marqués de Camarasa, a su sobrina, Victoria Eugenia Fernández de Córdoba y Fernández de Henestrosa, XVIII Duquesa de Medinaceli.
Hay agregación en los títulos y ciertos bienes de cada una de ellas quedan afectos al título principal, el de Medinaceli: es el caso del Castillo de Sabiote pero se podría citar el desaparecido Castillo de Las Navas (de San Juan) o el propio Palacio de Santisteban del Puerto, el que albergara hasta el s.XX su Administración en la zona.



Exposición de los trabajos de la catalogación e inventario de piezas, el audiovisual muestra el levantamiento virtual del edificio. Intervienen los profesores Castillo Armenteros y Ruiz Calvente, además del Arquitecto Apolinar Marín Zamora. Excma. Diputación Provincial de Jaén

Ciñéndonos estrictamente al Castillo de Sabiote hay que rememorar a su principal protagonista, previo a los Camarasa y consecuentemente a los Medinaceli: Don Francisco de los Cobos y Molina (Úbeda, 1475 – 1547)
De los Cobos y Molina pasa por ser uno de lo políticos más importantes de la Monarquía Hispánica, siendo Secretario Universal del Emperador Carlos I entre 1.529 y 1.547.
En 1.537 compra la villa de Sabiote, y castillo, fundando mayorazgo con Canena y Torres, heredándolo a su muerte su hijo, Diego de los Cobos, I Marques de Camarasa.
Esta fortificación como otras muchas del alto Guadalquivir cambian su función con el avance de la frontera: pasan de castillos a palacios y este, que se reformó precisamente en tiempos de Secretario Francisco de los Cobos, pasa de una importante fortificación de entre los siglos VIII o IX[2] a un esplendido palacio renacentista.
Después de la Guerra de la Independencia el castillo-palacio queda bastante arruinado. En 1.980, como bien privativo de los duques, es donado a la Fundación de la Casa Ducal y esta hace una cesión temporal al Ilmo. Ayto. de Sabiote, que es el que está llevando a cabo las labores de restauración, habiendose convertido, a día de hoy, en uno de los grandes atractivos del triangulo renacentista Ubeda-Baeza-Sabiote.


[1] Ortiz de Zuñiga

[2] Juan Carlos Castillo Armenteros

domingo, 6 de mayo de 2018

AÑO 1.232, APARICIÓN DE LA IMAGEN DE LA VIRGEN DEL COLLADO; CRUZ DE MAYO DE LA MAYORDOMÍA

Gabriel CARRACO HURTADO




“En ocasión de surcar la tierra el labrador Esteban Solís Palomares, en un collado próximo a Santisteban, a semejanza de lo que en otros pueblos sucediera durante La Reconquista, halló oculta y cuidadosamente colocada bajo silenciosa campana una imagen de la Virgen, indudablemente escondida en aquel sitio por los visigodos cristianos, para librarla de segura profanación por parte de los árabes... Una vez realizado el encuentro, y teniendo el suceso por milagroso, las autoridades eclesiásticas y civiles, en unión del pueblo, todos por unanimidad, y con el mayor entusiasmo, se congregaron en la plaza del pueblo...”
Mariano Sanjuán





Vídeo realizado por 
Mari Carmen Gallego y Juan Miguel Gascón


Este año la Cruz de la Mayordomía de la Virgen del Collado de Santisteban del Puerto recrea la aparición de la imagen -hecho que se documenta en una minuta del Escribano Juan de Funes (1)- en un collado extramuros de la Villa.
La minuta cita la aparición y refiere que al año siguiente, en 1.233, la Villa y el Concejo hicieron boto anual de azer la fiesta el dia de la benida Espíritu Santo.
En un escenario de antiguos utensilios de labranza destaca el arado y la campana; cuenta la tradición que el propio arado desterró la campana que escondía la imagen.
El escenario es el propio collado donde se apareció y construyó la Ermita del Exido y al fondo como se situaría la Villa.
Destaca esa primera imagen documental que tenemos de Santisteban del Puerto que realizara al acuarela Pier María Baldi, con motivo del viaje del príncipe heredero del Gran Duque Fernando II, Cosme III de Medici por España. Entre septiembre de 1868 y enero de 1869,  pasó y paró en Santisteban del Puerto.
    
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 (1) Joaquín Mercado Egea.

viernes, 4 de mayo de 2018

El Condado en el nuevo 'Diccionario Biográfico Electrónico' de la Real Academia de la Historia DB~e

Gabriel CARRASCO HURTADO



Se acaba de presentar el   “Diccionario Biográfico Electrónico”, de la Real Academia de la Historia DB~e, en un acto presidido por S.M. el Rey Felipe VI.
La puesta en marcha y desarrollo de la edición electrónica tiene el objetivo principal de crear una red cultural y social en torno a contenidos de tipo histórico-biográfico vinculados con todos los territorios que han formado parte, a lo largo de la Historia, de la Administración española.
La Real Academia de la Historia ha concebido la edición electrónica del Diccionario como entorno digital en el que conectar los intereses de tipo histórico-biográfico. No solo se mantiene de ese modo la red de instituciones y personas que han participado en el proyecto del Diccionario Biográfico Español, sino que podrá ampliarse a la generalidad de los ciudadanos que tendrían la opción de acceder a contenidos culturales en línea al tiempo que podrán contribuir a la mejora del proyecto a través de sus comentarios y aportaciones generando una sindicación de contenidos.
La primera aportación es la publicación electrónica de los datos biográficos mínimos de los más de 40.000 personajes que se incluyen en la primera edición del Diccionario Biográfico Español. De cada uno de ellos, se aportan sus lugares, ámbitos geográficos y fechas de nacimiento y muerte, así como los ámbitos disciplinares en que destacaron.
Además de la localización alfabética, se permite una búsqueda por la etiqueta que explota tanto el nombre y los apellidos como los seudónimos, sobrenombres o títulos nobiliarios por los que el personaje pueda ser conocido. Desde cada una de estas entradas secundarias, se remite a la principal, cuyos datos se pueden exportar en formato de texto.
Como muestra de esta valiosísima herramienta hemos escogido, de varios, tres nombres importantes en la historia de El Condado:

El primero de ellos es, quizá, el político más importante natural de Navas de San Juan, como lo fue el Prior de San Juan Bautista: Don Tomás Ruiz Tauste:


Ruiz Tauste, Tomás. Navas de San Juan (Jaén), 5.III.1772 – ?, p. m. s. XIX. Diputado, prior de Navas de San Juan.
Hijo de Tomás Tauste, de quien tomó su nombre, fue presbítero-prior de Navas de San Juan (Jaén).
Diputado por la provincia de Jaén en las Cortes Generales y Extraordinarias (1810-1813). Elegido el día 25 de enero de 1813 por los doce electores correspondientes en el Ayuntamiento de Jaén, según la Instrucción de 1º de enero de 1810 y la Orden de las Cortes de 21 de junio de 1812. Se le otorgó su poder el 29 de enero de 1813, siendo aprobado por las Cortes en la sesión pública del 16 de marzo, aunque se mandó pasar a la comisión de Constitución un recurso del Ayuntamiento constitucional de Villanueva del Arzobispo en el que se exponía que, en la Junta electoral del partido de Úbeda, se excluyó para aquella elección al elector parroquial, Antonio de Uceda, por ser exfreile, aunque legítimamente secularizado, por lo que se solicitaba de las Cortes que sobre este punto se hiciese la correspondiente declaración. No debió haber ningún impedimento, pues juró y tomó posesión de su cargo tres días después (marzo de 1813). Tuvo una muy escasa participación activa, no interviniendo en ningún debate y perteneciendo a una sola comisión, la Eclesiástica, en la que entró a formar parte, sustituyendo al diputado por Cataluña, Félix Aités.

Fuentes y bibl.: Archivo del Congreso de los Diputados, Serie Documentación Electoral, 2 n.º 4.
Congreso de los Diputados, Diario de sesiones de las Cortes Generales y Extraordinarias, Madrid, Imp. de J. A. García, 1870; J. M.ª García León, Los diputados doceañistas, t. II, Cádiz, Ayuntamiento, 2006, pág. 536; M. Urquijo Goitia (dir.), Diccionario biográfico de parlamentarios españoles. Cortes de Cádiz. 1810-1814, Madrid, Cortes Generales, 2010 (CD-Rom).

García León, José María, Tomás Ruiz Tauste, en Real Academia de la Historia, Diccionario Biográfico electrónico (en red, www.rah.es)

Como continuación hemos escogido la biografía que genera el DB-e de la Real Academia de la Historia del gran Mendo de Benavides, fundador de la Iglesia Colegio de Santiago de Castellar:


 Benavides y Merino, Mendo de. Santisteban del Puerto (Jaén), ¿1569? – Murcia, 17.X.1644. Jurista, fiscal del Consejo de Órdenes Militares, oidor del Consejo de la Inquisición, presidente de la Chancillería de Granada y obispo.
Era hijo natural de Diego de Benavides y de la Cueva, conde de Santisteban y caudillo mayor del obispado de Jaén, y de Teresa Merino, sobrina nieta del cardenal Esteban Gabriel Merino, cuando ambos eran solteros.
Fue dedicado al estudio, comenzando su preparación primero en la Universidad de Salamanca y después en la de Valladolid como colegial en el Colegio Mayor de Santa Cruz, donde se licenció en Derecho Canónico. En 1598 ejerció la docencia en esta universidad impartiendo Instituciones Civiles.
En 1609 ocupó la plaza de oidor en la Chancillería de Valladolid. En 1610 recibió el hábito de la Orden Militar de Santiago y muy pronto pasó a ocupar el cargo de fiscal del Consejo de Órdenes Militares. En 1617 ingresó en el Consejo Supremo de la Inquisición, primero como oficial para ascender posteriormente a fiscal y oidor. El 23 de julio de 1624 fue nombrado presidente de la Chancillería de Granada en sustitución de Martín Fernández Portocarrero.
A propuesta de Felipe IV fue nombrado en 1633 obispo de Segovia y consagrado el 1 de enero de 1634 en la iglesia colegial del Sacromonte en Granada.
En mayo de 1635 por disposición del Rey hizo una visita de inspección a los cuatro colegios mayores de Salamanca, los cuales comunicaron el hecho al colegio mayor de Santa Cruz de Valladolid para que supieran a qué atenerse. En 1641 fue promovido al obispado de Cartagena-Murcia y en esta ciudad falleció; en el trascoro de su catedral recibió sepultura. Se afirma que su cuerpo fue trasladado posteriormente a la iglesia que fundara en Castellar.
Por el amor a su tierra y por hacer bien a sus habitantes llevó a cabo lo que desde muy joven tenía pensado, que era fundar una iglesia bajo la advocación de Santiago, que decidió establecer en Castellar, en tierras señoriales del condado, para lo que dedicó los bienes y rentas conseguidos antes de ser obispo de Segovia según escrituras ante notario de 1633 y 1634. Fue una fundación eclesiástica, a modo de Colegiata (así se le llama), con carácter de centro docente aprobada por el obispo de Jaén Fernando de Andrade y Castro, pues de las veinticuatro capellanías (doce mayores y doce menores), cinco de las mayores, por oposición, estaban dedicadas a impartir Decretales, Decreto, Doctrina Moral y Gramática para enseñar a medianos y mayores; en las capellanías de menores dos estaban dotadas para maestros, una de niños y otra de gramática, mientras que otras las dedicaba a una capilla de música con organista y ministrales. No se conocen las constituciones que redactara Mendo de Benavides, pero se conservan los estatutos de la fundación aprobados en 1693 por el papa Inocencio XII. El edificio destaca por su sobriedad; en él el clasicismo queda resaltado por elementos greco-romanos. En el centro de la fachada hay una hornacina con la escultura de Santiago flanqueada por escudos gemelos con las armas de los Benavides.

Bibl.: Fvndación, constitvción y patronazgo de la Yglesia o Capilla del Castellar condado de Santisteban [...], Nápoles, Regia Emprenta de Carlos Porfile, 1693 (Capilla de Santiago del Castellar); M. Sanjuán Moreno, Santisteban del Puerto y su comarca: datos históricos, Madrid, R. Velasco, 1909, págs. 113-116; J. L. Martínez Bara, Catálogo de informaciones genealógicas de la Inquisición de Córdoba conservadas en el Archivo Histórico Nacional, vol. I, Madrid, 1970, págs. 89- 90; J. Mercado Egea, La muy ilustre villa de Santisteban del Puerto, Madrid, 1973, págs. 262-263; P. Galera Andreu, Arquitectura de los siglos XVII y XVIII en Jaén, Granada, Caja General de Ahorros y Monte de Piedad, Seminario de Estudios, 1977, pág. 192; M. Caballero Venzalá, Diccionario Bio-Bibliográfico del Santo Reino, vol. I, Jaén, Instituto de Estudios Giennenses, 1979, págs. 230-232; P. Gan Giménez, La Real Chancillería de Granada (1505-1834), Granada, Centro de Estudios Históricos de Granada y su Reino, 1982, pág. 198; J. Martínez Millán y T. Sánchez Rivilla, “El Consejo de Inquisición: (1598-1700)”, en Hispania Sacra, 36 (1984); R. Gómez-Rivero, “Consejeros de Órdenes. Procedimiento de designación (1598-1700)”, enHispania. Revista Española de Historia, vol. LXIII/2, n.º 214 (mayoagosto, 2003).

Coronas Tejada, Luís, Mendo de Benavides y Merino, en Real Academia de la Historia, Diccionario Biográfico electrónico (en red, www.rah.es)

Por último Don Antonio Benavides y Fernández de Navarrete, el Ministro Benavides. Era natural de Baeza pero su vecindad más arraigada la tuvo en Villacarrillo. Don Antonio fue propietario del gran latifundio de Santisteban del Puerto conocido desde antiguo como Tierras y Cortijos de los Robledos. Esa posesión al sur de Santisteban del Puerto condensa no poca historia de lo que fue la vida en El Condado.
Añadir que el Ministro Benavides fue Académico de la Historia y posteriormente Director al que sustituyó, por razones de edad, Don Antonio Canovas del Castillo.
La autoría es de Don Juan Soto Climent.



 Benavides y Fernández de Navarrete, Antonio. Baeza (Jaén), 20.VI.1807 – Villacarrillo (Jaén), 23.I.1884. Ministro, embajador en la Santa Sede, senador, diputado e historiador.
El origen de su apellido se remonta a Alfonso VII. En 1376, Enrique II le otorga a un antepasado el señorío de Santisteban del Puerto (Jaén). En 1473 Enrique IV eleva este señorío a condado, que luego Felipe V convierte en ducado, que pasa a Medinaceli por casamiento de la III duquesa de Santisteban del Puerto (1746-1805) con el XII duque de Medinaceli (1749-1846).
Hermano menor del IV señor de Santisteban del Puerto, muerto en 1454, fue Manuel Benavides Mendoza, rama de la que procede Antonio.
La infancia de Benavides transcurrió entre su pueblo natal y Villacarrillo, donde su padre tenía propiedades y fue alcalde en 1819. precisamente en ese año, se trasladó a estudiar a Granada. Se matriculó en Leyes y fue nombrado doctor en 1826, cuando sólo contaba diecinueve años, y al año siguiente, catedrático de Novísima Recopilación. En 1828 fue miembro del claustro de la Universidad de Granada y vocal de la Junta de Hacienda.
Llamado por su tío Martín Fernández de Navarrete, marino e historiador, que en esta fecha era director de la Real Academia de la Historia, llegó Benavides a Madrid en 1830. Se interesó por la historia a la vera de su tío y de ahí quizá nacieron sus aficiones políticas.
El 19 de julio de 1831 el rey Fernando VII creó una Real Audiencia en la isla de Puerto Rico, de la que Benavides fue nombrado fiscal y luego juez oidor.
Volvió a España en 1836 y en 1837 contrajo matrimonio con María Antonia Godínez y Cea Bermúdez, unión de la que nació su único hijo en 1838 que murió a los siete años de edad.
Perteneció hasta 1834 al Partido Liberal. En ese año, los liberales se dividieron en moderados y progresistas, y entre los primeros se encontraba Benavides.
Diputado por Jaén en 1836, en las Cortes que dieron a luz la Constitución de 1837, fue elegido nuevamente diputado por Jaén en 1839.
En 1842 fue nombrado miembro del Instituto Histórico de Francia. En 1844 ostentó el cargo de jefe político de Madrid y ese año Isabel II lo designó ministro Togado del Tribunal de Guerra y Marina, “con retención del Gobierno Político de Madrid”. El 13 de abril de 1844, S.M. la Reina le encarga, junto al general Valdés y Joaquín Camón, formularan un Reglamento sobre la cuestión “negrera”. El 13 de noviembre de 1844 Isabel II le concedió la Gran Cruz de la Real Orden Americana de Isabel la Católica y ese mismo año salió diputado por Granada.
También en 1844 empezó a gestarse dentro de los moderados una escisión con el nombre de los puritanos, que se oponían a la modificación de la Constitución de 1837 entre los que se encontraba Benavides.
Con la oposición de los puritanos se aprueba la Reforma Constitucional defendida por Narváez.
En 1847 tenía el cargo de ministro de Gracia y Justicia de manera interina. En marzo de ese mismo año, Isabel II pasó el gobierno a los puritanos en la persona de Pacheco que nombró ministro de la Gobernación a Benavides. En este gobierno asumió la difícil tarea de unir a Isabel II con su esposo Francisco de Asís, cuyo matrimonio estaba roto, hasta el punto de vivir separados, uno en el Palacio del Pardo y otra en el de La Granja. Después de dos largas conversaciones, el Rey consorte puso como condición que saliera de Madrid el general Serrano, condición que no se cumplió y como consecuencia de ello cayó el Gobierno Pacheco a los seis meses escasos de su formación.
El 5 de marzo de 1847 fue nombrado académico de la Historia, llegó a director interino en 1862 y definitivo en 1864, luego lo sería a perpetuidad. Admitida su renuncia por razones de edad el 9 de diciembre de 1881, lo sustituyó Antonio Cánovas del Castillo.
El 14 de diciembre de 1852, el general Roncali formó Gobierno en el que, en una remodelación hecha unos días después, entra Benavides de ministro de la Gobernación. De este Ejecutivo opina O’Donnell: “El verdadero Presidente es Benavides, que tiene más talento y malicia que sus compañeros”.
Breve fue la duración de este gobierno, ya que en julio de 1853 Benavides era gobernador civil de Madrid. El 11 de febrero de 1853, la Reina había concedido a Antonio merced del hábito de la Orden Militar de Santiago.
En diciembre de 1857 se creó la Academia de Ciencias Morales y Políticas, de la que Benavides fue miembro desde su fundación.
En el gobierno que formó Lorenzo Arrazola en febrero de 1864 entra Benavides de ministro de la Gobernación.
Este ejecutivo sólo duró cuarenta días.
En diciembre de 1864 era presidente del Gobierno el general Narváez, al que presentó su dimisión el ministro de Estado Alejandro Llorente, sustituido por Benavides, que dimitió el 19 de julio de 1865, y más tarde todo el gobierno. Benavides ya no volvió a ser ministro, aunque en 1868, primero Narváez y a la muerte de éste (23 de abril de 1868) González Bravo, le ofrecieron la cartera de Marina o Estado, que rechazó.
El 18 de septiembre de 1868 se produjo la sublevación de Cádiz que condujo al exilio a Isabel II.
Benavides y su esposa acompañaron a la soberana a Francia. Volvieron a España por orden de la Reina en noviembre del mismo año. Se constituyó en Madrid un gobierno provisional que presidió el general Serrano, que dedicó sus esfuerzos en buscar un Rey para España. Finalmente las Cortes votaron el 16 de diciembre de 1870 a Amadeo de Saboya, que reinó con el nombre de Amadeo I. Abdicó éste el 11 de febrero de 1873 y se proclamó la Primera República el 11 de junio. En este tiempo Benavides redujo su actividad política. En 1872 fue nombrado académico de la Lengua para ocupar el sillón C mayúscula.
El 29 de diciembre de 1874 el general Martínez Campos restauró la Monarquía en la persona de Alfonso XII. Cánovas, que años antes había formado el partido alfonsino, tomó la presidencia del Gobierno y nombró a Benavides embajador en la Santa Sede.
Las dos principales misiones encomendadas al representante español ante el Vaticano fueron: acelerar la venida a España del nuncio para restablecer relaciones y atraer a la Santa Sede hacia la figura del Rey, ya que algunos círculos vaticanos simpatizaban con Carlos VII. En aquellos momentos la Guerra Carlista tomaba fuerza en el norte de España. Las dos cuestiones fueron hábilmente negociadas por Benavides con éxito. Se planteó entonces la reforma del artículo 21 de la Constitución de 1869, sobre la libertad de culto, y Antonio, profundamente religioso y tal vez influido por su hermano el cardenal, se puso del lado del Vaticano y tuvo que dimitir y volver a Madrid en octubre de 1875, no sin que antes Pío IX le impusiera la Cruz de la Piana Pontificia, que sumó a las de Portugal, Carlos III, Isabel la Católica, Caballero de la Orden de Santiago, etcétera.
A la muerte de su esposa en 1881, trasladó su residencia a su casa de Villacarrillo (Jaén), donde poseía propiedades agrícolas que se extendían por otros términos colindantes. Benavides murió el 23 de enero de 1884. El certificado de defunción dice que de “apoplejía pasiva”. Su cuerpo está enterrado en el cementerio del citado pueblo jienense.
Juan Rico y Amat escribió algunos breves juicios de sus coetáneos que ilustran la consideración que se tuvo de su persona. Así: “Escritor fácil y elegante, orador cáustico y ameno, erudito sin pedantería, Benavides ejerce una merecida influencia en la Cámara y los Partidos”.
Y el marqués de Molins dijo de él: “Su lenguaje correcto y fácil, su estilo más bien ameno que sublime; cuando combativo vuelve a la defensa de su opinión queda su adversario maltrecho y los espectadores regocijados [...]”. “Caballero de mediana estatura, más bien grueso que delgado, de fisonomía festiva y casi burlona, la color encendida, la barba rasa y escaso pelo. Usaba anteojos que más parecían ocultar, que no ayudar la penetrante malicia de sus miradas”.
Sánchez Fuentes concluyó: “No lleva nunca papeles ni apuntes de sucesos, ni fechas, todo lo tiene en la cabeza y hace de ello uso con la mayor discreción”.
Además de las obras citadas a continuación, en algunas fuentes se le han atribuido estos otros títulos, de los que no se ha encontrado referencia: Historia Política de Fernando VII; Historia Política de España de 1820 a 1823; Amadeo de Saboya Antipapa; Las Repúblicas Musulmanas en España; Examen crítico de la Historia de Ávila.

Obras de ~: Compendio histórico filosófico de todas las monarquías, con la biografía de todos los reyes y príncipes reinantes hasta el día, Madrid, Rivadeneyra, 1852, 3 vols.; “Memoria sobre la guerra de Granada y los textos y conciertos que precedieron a las capitulaciones de la ciudad”, en Memorias de la Real Academia de la Historia (Madrid), t. VIII (1852); con A. Oliván, Discursos pronunciados en el Congreso por los Señores Diputados Don Antonio Benavides y Don Alejandro Olivan, en la sesión del 9 de diciembre sobre el párrafo 17 de la Contestación al discurso de la Corona, Madrid, F. Pascual, 1857; Memorias de Fernando IV de Castilla, Madrid, 1860, 2 vols.; “De la indiferencia política”, enRevista Española (Madrid), año I, t. III, n.º 44 (noviembre, 1862), págs. 77-78;Discurso leído a la Real Academia de la Historia por su Director el Excmo. Sr. D. Antonio Benavides al terminar el trienio de su Dirección en 1867, Madrid, Imprenta de José Rodríguez, 1868; “Consecuencias inmediatas del testamento político otorgado por Carlos II”, en Revista Mensual (Madrid), t. II, n.º 6, 15 de junio de 1868, págs. 129-153; con M. Roca de Togores, marqués de Molins,Discursos leídos en la Academia de la Historia, en la recepción pública del Marqués de Molins, el día 29 de junio de 1869. Contestación del Sr. D. Antonio Benavides, Madrid, Real Academia de la Historia, Imprenta y Estereotipia de M. Rivadeneyra, 1869; “Regencias de España en el presente siglo”, en Revista de España (Madrid), t. XXII, n.º 88, 25 de octubre de 1871, págs. 465-477 y t. XXIII, n.º 89, 10 de noviembre de 1871, págs. 5-19; con M. Roca de Togores marqués de Molins, Discursos leídos ante la Real Academia Española en la recepción del Sr. D. Antonio Benavides, el día 24 de Noviembre de 1872. Contestación del Excmo. Sr. Marqués de Molins, Madrid, Imprenta y estereotipia de M. Rivadeneyra, 1872; “Tradición del laurel de la Zubia”, en Boletín de la Real de la Historia (Madrid), t. I, cuad. I (noviembre), 1877, págs. 14-26.

Bibl.: I. A. Bermejo, La Estafeta de Palacio: (historia del último reinado); cartas trascendentales dedicadas a S.M. el Rey de España Amadeo I, Madrid, Imprenta de R. Labajos, 1871- 1872; J. Rico y Amat, El libro de los diputados y senadores: juicios críticos de los oradores más notables desde las Cortes de Cádiz hasta nuestros días: (2.ª parte de la historia política y parlamentaria de España), Madrid, Est. tip. de Vicente y Lavajos, 1862-1866; C. García Montoro, Antonio Benavides Fernández Navarrete, trabajo de fin de carrera, 1971 (inéd.); J. Soto Climent, La Arquilla del Ministro, Baeza, Grupo M&T-Publicaciones, 2003; B. Pellistrandi, Un discours national? La Real Academia de la Historia entre science et politique (1847- 1897),Madrid, Casa de Velázquez, 2004, págs. 377-378. 

Soto Climent, Juan, Antonio Benavides y Fernández de Navarrete, en Real Academia de la Historia, Diccionario Biográfico electrónico (en red, www.rah.es)

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Con informaciones de la Real Academia de la Historia y de la Casa de su Majestad el Rey.
Las imágenes se corresponden con pantallazos de las entradas correspondientes en el  DB~e.