Gabriel CARRASCO HURTADO
Ante
nosotros una preciosa joya literaria medieval en romance gallego que es, además,
un documento sobre una de las demarcaciones más importantes que el Reino de
Jaén ha tenido: la Taifa de Baeza.
Esta
demarcación andalusí –que pertenece a lo que se ha dado en llamar las terceras
taifas, sucesoras al decadente califato almohade- pasa por ser uno de los
momentos más influyentes de lo que hoy es la provincia de Jaén, junto a la
Oretania íbera, por ejemplo.
Recoge,
la cantiga, lo que de primera mano vivió el niño que sería Alfonso X, Rey de
Castilla y León:
Sucedía
que su buena madre, la Reina Beatriz de Suabia tenía una curación milagrosa
cuando su padre, el gran Fernando III de Castilla dirigía personalmente, en el
verano de 1.226, el asedio del paso definitivo a las Andalucías: el asedio a
Capela o Capilla; todo con la eficaz ayuda de Abd Allah ben Muhámmad
al-Bayyasi, Emir de Baeza.
Cuentan
las crónicas que allí capituló para la cristiandad al Rey Fernando Sant
Astabin con todos sus téminos y aldeas…
Cantigas
de Santa María de Alfonso X el Sabio. Cantiga 256.