Gabriel CARRASCO HURTADO
La Casa de Santisteban del Puerto y la de
Camarasa (Sabiote) son casas agregadas al “piélago inmenso de grandezas”[1] que conforma la
Casa Ducal de Medinaceli; la de Santisteban se produce por el matrimonio
de Joaquina María de Benavides y Pacheco y Luis María Fernández
de Córdoba y Gonzaga, en 1.789 y la de Camarasa por la sucesión en 1.948
de Ignacio Fernández de Henestrosa y Gayoso de los Cobos, XVI Marqués de
Camarasa, a su sobrina, Victoria Eugenia Fernández de Córdoba y Fernández
de Henestrosa, XVIII Duquesa de Medinaceli.
Hay agregación en los títulos y ciertos
bienes de cada una de ellas quedan afectos al título principal, el de
Medinaceli: es el caso del Castillo de Sabiote pero se podría citar el
desaparecido Castillo de Las Navas (de San Juan) o el propio Palacio de
Santisteban del Puerto, el que albergara hasta el s.XX su Administración en la
zona.
Exposición de los trabajos de la catalogación e
inventario de piezas, el audiovisual muestra el levantamiento virtual del
edificio. Intervienen los profesores Castillo Armenteros y
Ruiz Calvente, además del Arquitecto
Apolinar Marín Zamora. Excma. Diputación Provincial de Jaén
Ciñéndonos estrictamente al Castillo de
Sabiote hay que rememorar a su principal protagonista, previo a los Camarasa y
consecuentemente a los Medinaceli: Don Francisco de los Cobos y Molina (Úbeda,
1475 – 1547)
De los Cobos y Molina pasa por ser uno de
lo políticos más importantes de la Monarquía Hispánica, siendo Secretario
Universal del Emperador Carlos I entre 1.529 y 1.547.
En 1.537 compra la villa de Sabiote, y
castillo, fundando mayorazgo con Canena y Torres, heredándolo a su muerte su
hijo, Diego de los Cobos, I Marques de Camarasa.
Esta fortificación como otras muchas del
alto Guadalquivir cambian su función con el avance de la frontera: pasan de
castillos a palacios y este, que se reformó precisamente en tiempos de Secretario
Francisco de los Cobos, pasa de una importante fortificación de entre los
siglos VIII o IX[2] a un esplendido
palacio renacentista.
Después
de la Guerra de la Independencia el castillo-palacio queda bastante arruinado.
En 1.980, como bien privativo de los duques, es donado a la Fundación de la Casa Ducal y esta hace una cesión
temporal al Ilmo. Ayto. de Sabiote, que es el que está llevando a cabo las
labores de restauración, habiendose convertido, a día de hoy, en uno de los
grandes atractivos del triangulo renacentista Ubeda-Baeza-Sabiote.