Gabriel Carrasco Hurtado
Es
curioso, interesa, aquello que ocupó a nuestros antiguos; con una ingente
cantidad de recursos materiales y humanos los naveros durante siglos se
ocuparon de los difuntos, canalizado en gran medida en la que es probablemente
la cofradía más longeva de Las Navas: La Cofradía de las Benditas Ánimas del
Purgatorio.
Hoy
uno de noviembre y mañana, la Iglesia católica celebra dos fiestas distintas
pero complementarias.
Las dos son de difuntos pero hay una distinción en el contexto católico romano: la de hoy son los santos difuntos: todos los santos, especialmente los no canonizados que son los difuntos que “gozan de la vida eterna en la presencia de Dios habiendo superado el purgatorio” y complementariamente mañana, día dos, se celebra el día los difuntos en estado de purificación en el Purgatorio
Todo
esto es un particularismo de la Iglesia Católica que la llevó, en gran medida,
al gran cisma de la Reforma Protestante; para Lutero, inspirador de la Reforma,
no existe el Purgatorio y es inútil orar por los muertos: "Debemos orar
por nosotros mismos y por todas las demás personas, incluso por nuestros
enemigos, pero no por las almas de los muertos" (La Iglesia Luterana —
Sínodo de Missouri- explicación de Lutero).
Anotamos
dos obligaciones estatutarias (Estatutos de 1.865) de la Cofradía de Ánimas de
Las Navas:
“Articulo
54.- Será también cargo de esta Cofradía una novena en sufragio de las benditas
ánimas en los nueve días que preceden a la dominica infraoctava de los Santos,
con oficio de difuntos de segunda clase, con doble solemne satisfaciendo a la
Parroquia por ellos los derechos de arancel y ciento cuarenta y cuatro reales
por las nueve noches”
“Articulo
55.- Ygualmente será de su cargo una fiesta solemne, con jubileo y sermón en la
dominica Infraoctava de los Santos y en ella deberán de confesar y comulgar
todos cofrades.../...”
Estos
dos artículos recogen preciosos “arcaísmos” litúrgicos:
La
novena del artículo 54, que es como la que se le hace a la Virgen de la
Estrella, son nueve misas que se hacían inmediatamente antes de la dominica
infraoctava de los Santos.
La
octava de los Santos se celebra el octavo día, valga la redundancia, después de
los Santos.
La
infraoctava de los Santos son los seis días que van desde el día de los santos
a su octava y la dominica infraoctava de los Santos es el domingo comprendido
en esos seis días.